Tener un hijo es una experiencia única e inigualable.
Los
bebitos son dulzura pura, los primeros pasos muy emocionantes, pero lo mejor
está a partir de los 2 años, cuando hablan y comunican todo lo que pasa por su
cabecita.
La mejor manera de compartir estos sentimientos es con
ejemplos, con situaciones y frases dichas por mis dos amorcitos:
Alberto (con 2 y 3 años cumplidos en diciembre):
- En el coche, después de su primer día de cole: ¿qué tal todo?, - Bien (silencio) No he querido beber leche (silencio). Ni leche, ni zumo ni cerveza. (uf, que alivio)
- En la parada del autobús, esperamos al lado de un señor y dice en voz alta. – “Mamá, ese señor no tiene pelo en su cabeza”, mira al señor y le dice –“Mi mamá no tiene pilila” (consolando a su primer calvo)
- Llegamos a un parque y vamos a saludar a una amiga con un par de hijas. – “Niños ¿qué se dice?, ingenua de mi que esperaba un saludo y me encuentro con un - “Pancetaaa” (por favor Papá: deja de enseñar a tus nietos piropos conquenses)
- Vamos a buscar a Nico y esperamos en la puerta de su cole rodeados de madres, mi Albertito encantado de tener tanto público no para de hablar: “… y ese árbol no le caducan las hojas, no se caen y se llama el árbol del pene” (perenne muy complicado de pronunciar)
- Cuando éramos pequeños mi madre llamó “sopas de gatito” a la leche con galletas, cualquier cosa con tal de hacerme comer. El nombre ha llegado hasta Alberto que las ha rebautizado como “las sopas de Agapito” (mi vecino de enfrente)
- ¿Jugamos?; - “si cuando termine de cocinar…” (silencio) me mira y pregunta ¿nos tomamos un caféssss? (vamos que le haga caso ya)
- Último día de cole, Papá Noël ha visitado su clase: - “Mamá, no me ha traído a Pluto”, - “ya bueno, Pluto vendrá por Navidad”. (silencio) – “Mamá, Papá Nöel era un chico disfrazado”…. (Aaahhhhhhh…)
Nicolás (con 4 y 5 años):
- Se escucha un golpe y algo que se rompe – “Mamaaa, no te preocupes sólo ha sido un cristal”.
- “Hoy hemos jugado a Bombis”; - ¿zombis?; – No, bombis. Son zombis con cabeza de bombas que explotan y así dan más miedo (ay, si te pillan los guionistas de The Walking Dead).
- Me enfado: - “Nico me estás poniendo negra!” (Silencio) – Mami siempre dices eso y nunca cambias de color, sigues carne blanca.
- Se enfada Nico: “tú nunca me dejas hacer nada, mi bola es mi bola y deja de reírte” (queriendo ir a su bola).
- Me vuelvo a enfadar y después de regañarle me mira muy serio y me dice: “mamá, necesitas divertirte un poco” (ese fin de semana durmieron con los abuelos).
- Agosto, cumple 5 años y grita: “Mamá me ha salido un pelo, ya soy un tío”.
- “Estoy pintando un supermarino”; ¿un submarino? – “No, un supermarino que va super-rápido”
- Mamá te quiero tanto que no me cabe en el cuerpo…
Lo mejor de todo es que continuará…
Feliz año nuevo